Es posible que para la mayoría haya pasado desapercibido un pequeño detalle en la reunión de Presidentes de Comunidades Autónomas.
No es importante en sí mismo; sí llamativo o peculiar.
El detalle no es otro que la posición de las banderas autonómicas. De dos de ellas, más concretamente: la vasca y la catalana (si no me equivoco, y creo que no).
Una y otra están flanqueando, intencionadamente, a la bandera central, la española, la común, la de todos. Intencionadamente porque el golpe de efecto no es casual ni fruto de una coincidencia.
Pero, ¿a qué viene?; ¿cuál es la pretensión de tan estudiada ubicación?
Cada uno extraerá sus conclusiones y deducirá lo que más le convenga a su teoría.
Yo, por mi parte, tengo muy claro el porqué y el para qué de la escenificación. Y aunque no me parece un gesto tan cardinal como para darle mucho escaparate; sí me parece digno de mención.
Ahí lo dejo y que cada quisque molee los pensamientos que más le cuadren.
No es importante en sí mismo; sí llamativo o peculiar.
El detalle no es otro que la posición de las banderas autonómicas. De dos de ellas, más concretamente: la vasca y la catalana (si no me equivoco, y creo que no).
Una y otra están flanqueando, intencionadamente, a la bandera central, la española, la común, la de todos. Intencionadamente porque el golpe de efecto no es casual ni fruto de una coincidencia.
Pero, ¿a qué viene?; ¿cuál es la pretensión de tan estudiada ubicación?
Cada uno extraerá sus conclusiones y deducirá lo que más le convenga a su teoría.
Yo, por mi parte, tengo muy claro el porqué y el para qué de la escenificación. Y aunque no me parece un gesto tan cardinal como para darle mucho escaparate; sí me parece digno de mención.
Ahí lo dejo y que cada quisque molee los pensamientos que más le cuadren.